Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de 2022

Borracha sin haber tomado una gota de alcohol.

 Estoy de nuevo en ese sube y baja, dirvirtiendome mientras exploro la profundidad de mi mente... No estoy construyendo un castillo, es nada más un imperio. Mira que añadirle tantas palabras a lo bonito no tiene sentido. Las palabras son adornos que están muy bien, pero las acciones y la compañía expresan aún más.  Escribí un montón de cursilerias después de que te vi, escribí un montón de versos románticos después de que me vi. Son sólo escritos llenos de verdades que atesoro debajo de la cama. Si soy todo eso que dijiste, cuando me veo en tu reflejo me gusta y no me asusta.  A veces escucho canciones tristes, no estoy deprimida, es sólo que me gusta la expresión, me generan placer las notas tristes. Así como también algunas veces escucho música romántica, de esas canciones cursis, de esas que se escuchan en secreto. No tengo vergüenza, ni con tu sombra.  Suelo pasearme por esos momentos indelebles, en lo que me permito salir del silencio, esos momentos en los qu...

Huir

   Huyes, nunca sabes de qué estás huyendo, sólo sabes que tienes esa constante sensación de no estar donde quieres estar, algunas veces hasta pierdes la respiración porque se te sube la ansiedad a la cabeza y piensas que no lo lograrás.  Otros días se vuelven grises, te invade la nostalgia de lo que podría haber sido y hasta te pones triste por lo que aún no es. Luchas muy fuerte, te pones un poco mejor porque crees que todo cambiará, porque buscas refugio en la música y el arte en general, te distraes, pero algo te sigue diciendo que si te mueves, tal vez llegues a la cima.  Mi amor, tú no te gustas cuando quieres huir.  Se te notan las ganas de inmiscuirte en cada rincón de la vida real, aunque eso implique compartir en compañía de otros o solamente abrazar la soledad.  Buscas consumir actividades que te transmitan tranquilidad y en donde puedas aprender algo nuevo, una vía para sobrevivir al caos que llevas años cargando dentro de ti.   El vac...

Mi película, mi vida en la gran ciudad.

 Era un día gris y quería llover, un domingo revuelto entre el descanso y la nostalgia. Domingos, días en los que a veces, “se extraña más a la gente que se quiere”. Han sido tantos domingos ya, que he perdido la cuenta, tanto tiempo sin escuchar sus risas y sin sentir sus abrazos. Siete años para ser exactos.  La avenida camino al teatro está un poco vacía, tomaré un café con mi amigo Daniel. Le pedí expresamente que no me obligara a quitarme los lentes, la noche había estado un poquito pesada, entre el alcohol y el cigarrillo, mi cara estaba desencajada. Yo pensé que no tendría lágrimas, creí que ya había logrado superar el fracaso del proyecto de trabajo en Panamá, todo lo invertido, todas las horas, un año entero trabajando en un proyecto, para que se disolviera por “diferencias irreconciliables entre las partes” ¡carajo! Un bendito divorcio entre una pareja, que era parte fundamental de la sociedad y se fue al carajo todo. Eso sin contar, que en el amor últimamente no he ...

Carta a la novia de mi ex. —Estefania.

   Hola Paulina, tú no me conoces y tampoco me conocerás, ojalá que sí Alberto te habló de mí, entiendas que sólo soy parte de una pasado dormido. Por cierto, cuándo fuimos a comer helado, sólo comimos helados y hablamos. Luego, a pesar de que él fue a varios eventos en los que nos encontramos, nunca pasó nada entre nosotros.  Supe que se van a casar y que tienen una bebé. Así que te escribo para felicitarte y decirte que te casaste con un buen hombre. Un hombre al que yo celaba todo el tiempo, un hombre que me dijo: “te amo” y yo me le reí en la cara. Un hombre que casi todas las semanas llegaba con un chocolate a visitarme, o me invitaba a salir y él invitaba todo, o me invitaba a ver películas juntos una vez al mes cuando su familia solía irse de viaje. Alberto era ese que dedicaba canciones de balcón a balcón. Él fue a un concierto de Oasis, “al que yo no pude asistir porque me tocaba trabajar” y él me llamó en medio del concierto para que yo pudiera escuchar mis canc...

Un sueño de una buena jugada de mi mente

  La mente es un arma de doble filo, bien dicen que “si logras dominarla, dominarás el mundo”. Después de una complicada noche de discusiones entre mi alter ego y otra personalidad que vive en el anonimato tratando de pisar caminos desconocidos, en los que sólo mi mente puede ingresar, me arropó el sueño. “Hace mucho que no sueño” me venía repitiendo estos últimos días, antes, cuando quería soñar buscaba la manera de hacerlo, pero me dejé de eso, porque me desenamoré de los sueños que me hacían construir ilusiones montadas en una nube de plantas verdes. Estaba aquí, en la Ciudad de México. Entré a una oficina como si ya fuera costumbre, y ahí estabas tú, vestido de negro “como casi siempre”, me saludaste mostrando una sonrisa: —Hola muñeca, ¿cómo estás? —Hola hermoso, bien. Sólo vine de paso por aquí, ¿y …? —¿Y ella quién es?— se escuchó una vocecita salir debajo del escritorio, salió una niña pequeña, de tez blanca, cabello negro y ojos castaños —¡Hola princesa, que bonita que e...

Despacio, que el tiempo se nos va.

   Viernes, 8:55 am, Ania se sienta en su sillón y empieza a debatir en silencio consigo misma, “¿qué será de mi vida este viernes?”. Con una hermosa resaca, se levanta, se prepara un café muy cargado y vuelve a sentarse en el sillón azul de la sala de su depa. La noche anterior había sido un desastre, se encontró con Pedro, el chico con el que solía salir hace un mes y terminaron besándose, sin ella entender el por qué.  Sacó su diario y empezó a escribir:  “Esta vez me toca ser más sincera, sobre todo ser sincera conmigo misma. Amar da un poco de miedo, sobre todo cuando amas tanto que sientes que ese amor, te anima a amarte aún más a ti misma. ¿Por qué me sigue dando miedo lo sano o lo bonito?  Creo en el amor, pero me da miedo el compromiso, quizás pasa cuando eliges mal, pasa cuando dejamos lo bueno por lo no tan bueno, pasa cuando la vida nos da muchas cachetadas para ver si despertamos de una vez por todas. A mí ya me cansaron las cachetadas”  El son...

Nostalgia

   Me quería amarrar con tus ramas, quedarme atada al  árbol, quedarme cerquita de tus hojas y oler el perfume que se mezcla con la brisa.  Me quería devolver en el tiempo para volver a explorar tus aguas, ríos y mares.  Quería atravesar el espacio sideral, hacer un par de ajustes con mi yo del pasado, valorar un poco más lo efímero, lo que alguna vez creí eterno.   Quería que duraras por siempre en mi y por lo menos eso logré.  Me quise hacer la inolvidable a través de mis letras, y no sé pero, siento que no estoy tan lejos como 10 años atrás.  Me quise parecer a aquella, a la que nada le importa y pifié muchas veces en ese camino, además no es cierto, me importan tantas cosas que en su momento sentí que quizás no dije lo suficiente, quizás se borraron esas palabras en el tiempo, a lo mejor fue que no lo supe decir.  Que la vida me alcance para descifrar lo que habita dentro de mí, estando lejos de tí, lejos de casa, lejos de la vida qu...

¿Realidad VS Sueños?

 Voz de narrador: Dos hermanas en un probador, una conversaión de esas corrientes. —"Quiero estrellas fugaces" pasajeros perdidos — dijo Anastasia mientras se probaba aquel vestido rojo con la raja subida de tono del lado del corazón y con diamantes en el pecho. —Ya ni sabes lo que dices Nastya, hablas así porque ya no quieres nada con Dimitri, pero apenas te des cuenta de que él te hace sentir mejor que los demás y él se de cuenta de lo mismo, volverán enseguida, ustedes ya deberían casarse — respondí —Probablemente Carlota, pero independientemente de eso, Dimitri y yo necesitamos un descanso. Ya luego veremos. No te niego que nos amamos, pero ahora mismo no es nuestro momento. Pruebate tú este vestido rojo, ¡anda! Que el rojo te sienta muy bien. Yo me quedo con el azul rey. —¡Qué loca que estás! Practicamente me estás obligando a ir a esa fiesta, sólo porque quieres que me encuentre con Tom, pero ya te dije Nastya, no puedo seguir así con él. —Pero, ¿por qué si tú lo amas?...

El último escrito en la mansión Foster y nos vamos

 He estado escribiendo en silencio todos estos días y eso me da paz. Hoy quise escribir a voces y sucede lo mismo, me da paz.  Quiero escucharte toda la tarde hablar, parte de la mañana y de la noche, o hablar en silencio contigo.   Mi emoción no me está dejando dormir, como decía una amiga: "Vas pa'l cielo y estás llorando". Y sí, resulta que esas lágrimas son de alegría, ya no de angustia, ya no para generar un llamado de atención absurdo, esto es para mí. Me he vuelto suceptible a las subidas y bajadas que he dado en la vida.  ¿De qué sirve el cielo ahora mismo si no es para volar? En la cima también hay miedos, esos amigos no se van, ellos siguen susurrando pero, nos estamos amigando.  El miedo se transforma en fortaleza y en impulso para pegar el salto de lo onírico al mundo real.  ¿De qué sirve la violencia si es algo que nos causa dolor? Dolor físico al violentado, dolor moral al que tuvo la acción de violentar. No es agradable.  No sé si l...

No se trata de la letra de la canción

   Todos tenemos esa lista de canciones que a lo largo de nuestras vidas, vamos agregando a nuestro playlist personal, esas canciones que nos llevan a otro mundo. Esas canciones que aunque no entendamos la letra o simplemente no hemos prestado atención a lo que dicen, nos mueven por dentro. Canciones tristes que nos recuerdan momentos alegres, canciones alegres que nos recuerdan momentos tristes. Letras sin sentido que nos conectan con sentimiento que no se relacionan con lo que quiso decir John Lennon al componer Imagine, o pensamientos que nos inventamos y relacionamos con la canción de Wake Me Up When September Ends, sin entender el trasfondo de la composición de Billie Joe Armstrong, Mike Dirnt y Tré Cool.  Canciones que escuchamos y creemos que son de amor, o que están relacionadas con algún otro y que en ocasiones tienen que ver con un sentimiento relacionado con un espejo interno del artista quien creó la obra, muchas veces las letras no tienen explicación. Porque...

La primera vez que se tocaron fue con la mirada

 La primera vez que se tocaron fue con la mirada.  Ella no se olvida de ese murmullo que recorría la habitación,  en medio del ruido externo, estando en compañía de otras miradas, sus ojos la invitaban a mirarlo. No podía sostener la mirada porque la profundidad de sus ojos seducía su mente.  Él miraba sin que nadie lo viera, ella era la única que sentía como él clavaba sus ojos en sus piernas cuando hablaba de sus viajes, sólo ella sentía su atención en cada palabra, en cada historia que ella contaba para hacer un poco más amena la noche, su torpeza y sus risas rodeaban la sala y hacían reír a los invitados. Por dentro estaba encendida,  por fuera mostró templanza y comodidad. Ilusos sin sospechas... Se les venía una noche intensa.  Abrieron la puerta, hicieron que toda la noche fuera suya. Ideas que van, ideas que vienen... queriendo conocer cada parte de sus mentes cargados de brillo,  oscuridad, seducción,  tristeza,  alegria, ambos exper...