Desde el Amor Incondicional todo fluye...
Cierro los ojos y me encuentro con una linea invisible que me transporta a un lugar lleno de flores, estrellas, dragones, doncellas, varitas mágicas y sueños materializados. Vuelvo a creer, a crear, vuelvo a sentir como corre en mi interior el brillo artístico que me va elevando a niveles superiores.
Se me vienen millones de ideas, que me llevan por un bosque encantado en el que emanan conocimientos relacionados con aquellas cosas que no podemos tocar pero que aún así sabemos que existen y son reales. Hay tanta vida y tanta verdad en nuestro interior como en nuestro exterior. Entiendo que desde la preocupación que nos inyecta este viejo sistema que está ya bastante roto y cansado, el exterior se afea y se vuelve incomodo, porque desde el no merecer cosas grandes empezamos a construir y armarnos un calabozo maligno de autodestrucción.
Me adentro por ese bosque, mi propia búsqueda constante a través del latir de mi corazón me indican el camino a seguir, esta vez sintiendo, dejándome fluir a través de la intuición, sin olvidar o hacer a un lado el amor incondicional. Me siento tan ligera, tan en paz y conectada con mi fluir interior, me estiro, me elevo, abro las alas de lo eterno, lo que quiero lo proyecto, respiro mucha paz y en medio de todo las flores comienzan a bailar la danza del infinito, ríen, gozan, liberan sus aromas que me dan calma, me re-conecto con la esencia de ellas y descubro tanta belleza en ellas que me enamoro y me envuelven en su baile, cantamos de alegría. Sigo mi camino, un colibrí verde platinado se acerca a susurrarme en el oído el saludo de mis seres mas queridos, manifestando estar bien dentro de tanto adversidad, en un suspiro devuelvo el saludo que se va y viaja a través de todo el mundo, hasta la sabana Africana y también al caribe venezolano.
Estoy en plenitud, vibrando armonía, todo el camino está pintado y cada paso que doy señala y remarca el futuro. Con mi varita mágica voy regalando sueños y haciendo que los seres de luz crean que también para ellos en posible manifestar esos sueños. Voy sembrando amor para cosechar amor. Desde mi fuerza vital impulso a lo nuevo, activo con el fin de sobrevivir. Enlazo los mundos con el fin de igualar para dar forma. Sano para conferir poder. Canalizo con el fin de purificar mediante la sintonización. Armonizo con el fin de amar con integridad. Juego realizando las ilusiones, la magia con el tono de la intención. Produzco sabiduría mediante la manifestación. Disuelvo con el fin de explorar a través de al la liberación. Me dedico con el fin de encantar con la cooperación. Transciendo mi mente y mi visión con la sola presencia.
Cada don se fusiona con mi poder principal que es embellecer a través del arte, creando un equilibrio Universal desde adentro hacia afuera, señalando el camino, guiando mediante las estrellas que forman parte de mi y yo de ellas, a través de la noche que es mi guía y que me eleva a través de la abundancia.
Yo soy tu otro yo, en este bosque encantado se encuentra toda la magia que alguna vez buscamos, en este bosque de colores y tonos diferente te aseguro que encontraras la magia a tu manera y podremos todos tocar el cielo. Y si, también esas otras galaxias que están allí afuera.
Con mirada de águila por encima del bosque encuentro el castillo azul que me regala su mágica presencia. Sabía que lo encontraría, una de mis voces se asombra porque tanto esplendor y belleza. Parece un dibujo sacado de un cuento pero es real, existe en este plano y es parte de nuestro planeta también.
El mensaje que recibo en esta oportunidad y desde siempre es:
"La magia interna y externa siempre ha estado allí, siempre ha sido parte de nosotros, podemos acceder a ella cada vez que lo sintamos. Volvamos a ser niños."
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